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martes, 18 de noviembre de 2008

Niña cubana castigada por el gobierno de Cuba


Repasando la prensa internacional, me encuentro con una noticia, que no es primera vez que escuchamos los cubanos, pero no por esto, deja de estremecernos.

En la Isla de la Juventud, Cuba, una niña de tan sólo 7 años, Daviana González, tiene una preocupación mucho más importante que la devastación de los recientes huracanes, y es el poder reunirse con sus padres, que actualmente se encuentran en Miami, EUA. Los padres llegaron a Miami, después de haber abandonado una misión por varios países como médicos al servicio del gobierno de Cuba.

Durante medio siglo, los niños cubanos sufren las consecuencias de una política implantada por la Dinastía de los Castro, que trata a toda costa de mantener una imagen ficticia, de humanidad y de solidaridad.

El haber abandonado la misión encargada por el gobierno cubano, de ejercer la medicina fuera de Cuba, en otros países, que pagan éste servicio en divisas necesaria para engrosar las arcas de la Dinastía de los Castro, les supone el castigo de no poder reunirse con su hija.

A éste castigo, al puro estilo de la era medieval, hay que sumarle, la intervención de los salarios percibidos por su trabajo, que no solo comprende el fruto del esfuerzo de largos años de estudio, sino la separación por largos periodos de tiempo, de su familia, de su casa, etc. De éste salario intervenido por el gobierno de Cuba, solo perciben estos médicos cubanos, una ínfima parte.

Esta Dinastía de los Castro, que se autoproclama seguidora de los principios de nuestro poeta nacional, José Martí, demuestra con hechos, todo lo contrario.
La obra y los pensamientos de Martí, señala a los niños como la “esperanza del mundo”. La Dinastía de los Castro, lleva medio siglo, asesinando esas esperanzas.

Cuba se encuentra adscrita a la Convención de los Derechos del Niño.

Precisamente con éste hecho, se viola el artículo 2.2, de la Convención de los Derechos del Niño.

Entonces cabría preguntarse, ¿por qué no expulsan al gobierno de Cuba de ésta Convención?

En el corazón de ésta niña, soplan cada noche los vientos huracanados de la soledad, de la separación de sus padres, ninguna ayuda podría resarcirla de la devastación que produce en ella, el huracán de la separación de sus progenitores. Por lo que ésta temporada ciclónica, no pasará por lo menos para ésta niña, hasta que logre su mayor anhelo.

La Dinastía de los Castro, no la quiere la generación de los más mayores, por la falta de libertades, por la experiencia y el conocimiento.

La Dinastía de los Castro, no la quiere la generación de la juventud, por la falta de libertades, por la falta de oportunidades, y el conocimiento.

La Dinastía de los Castro, no la quiere la generación de los niños, porque los separa de sus padres, de sus seres queridos.

¿Y la generación que está por venir?, pues esa, cada vez son menos.

Noticia en el Nuevo Herald

HIJOS DE MÉDICOS RETENIDOS EN CUBA

3 comentarios:

Anónimo dijo...

bueno lo que creo que debes cambiar tu postura de ataque, y luchar para que levanten el bloqueo contra cuba, que no a traido ningun resultado.

Francisco Sau Boíx dijo...

La postura depende de que lado se mire, desde el lado del pueblo, estoy defendiendo, desde el lado de la Dinastía de los Castro, estoy atacando.
Por otra parte, supongo que te refieres al embargo económico establecido contra el gobierno de Cuba, pues si estoy de acuerdo que se levante, así sería de interesante esperar, cual sería la explicación por parte de tus defendidos, al único "bloqueo" que ha estado sometido el pueblo cubano durante medio siglo.

Nesty dijo...

Cuando lei el titulo del articulo pense que era una historia mas crítica, no al gobierno, sino a los verdaderos responsables por la seguridad de la niña que segun cuenta en su historia quedo sola.
Si habia que criticar y condenar a alguien , pues hubiese comenzado por los padres que levantaron vuelo hacia Miami y dejaron a su hija sola.
Solo ha dedicado lineas a condenar al gobierno cubano. Lastima que en sus años que residio en Cuba no haya podido ver constatar el gran sentido paternal de los padres que en los años duros de la crisis economicas preferia quedarse sin comida para darsela a sus hijos.