Antecedentes. El pasado 25 de mayo se ofreció un conversatorio en la casa de José Díaz Silva, que fue reprimido por la policía política, resultando golpeados por oficiales el dueño de la casa y su hijo. En ese momento se mostró constancia fotográfica de los golpes. Díaz Silva fue ingresado en Observaciones en el Hospital Clínico Quirúrgico y efectuó la correspondiente denuncia a la Estación de la PNR (Policía Nacional Revolucionaria) de Santiago de las Vegas. Allí le dijeron que no había sido un oficial quien lo pateó, sino un miembro del pueblo enardecido.
El lunes 8 de junio, fueron detenidos José y su hijo en un operativo de la Seguridad del Estado a las 5 de la mañana. Ernesto Díaz Esquivel fue conducido a la Séptima Unidad de la PNR y de allí –el mismo día- trasladado a la prisión de Valle Grande, notificándole que se le había revocado la libertad condicional, sin haber pasado por el juez de ejecución.
Mientras estaba detenido en una Unidad de la PNR de San Miguel del Padrón, a José Díaz Silva le dijeron que a su hijo le habían revocado la libertad condicional por su culpa, y le exigieron para dejar a Ernesto en libertad, que abandonara la oposición. Ante la negativa de José lo dejaron a él en libertad.
Por su parte a la madre de Ernesto, le dijeron en la 7ma. Unidad, que le había pegado a un policía, todo lo contrario a lo que sucedió, y que lo acusaban de atentado.
El martes 9 de junio fueron a llevarle el aseo a Ernesto sus padres, a la prisión de Valle Grande, y éste les comunicó que lo habían puesto en una rueda para ser identificado por seis personas de la tercera edad, la primera vez no lo reconocieron. Lo sacaron de allí y le cambiaron el pullover por uno blanco (sin embargo el día de los sucesos tenía puesta una camiseta tipo camuflaje) y las personas lo identificaron. Según plantearon estaban parados a más de 50 metros del lugar de los hechos. Además existen fotos que permiten asegurar que allí no había nadie.
En el día de hoy, a las 5 de la mañana, volvieron a detener en su casa a José Díaz Silva, mientras lo arrestaban lo filmaron con una cámara de video. A media mañana, estando su esposa sola en la casa, retomaron la práctica de los mítines de repudio y condujeron hasta allí un numeroso grupo de trabajadores de Labiofam, que habían movilizado con antelación y un auto con altoparlante para gritarle insultos y consignas.
No se sabe donde se encuentra José Díaz Silva, pero si se pudo conocer que algunos disidentes que han tratado de llegar a la casa, a manifestarle su solidaridad, han sido detenidos.
Vladimiro Roca Antúnez
Martha Beatriz Roque Cabello
Ciudad de La Habana, 11 de junio de 2009.
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