Barcelona/ Mambí en A/ Unas pocas mujeres cubanas protagonizaron una protesta en el municipio Cotorro de La Habana, Cuba, el pasado 1º de Marzo.
Seguramente muchos se preguntarán que dónde está la inmensidad de la protesta cuando se pueden contar con los dedos de una mano las participantes. Pues precisamente ahí radica la inmensidad de la protesta; contrario a la exclamación de una de las inertes expectadoras, éstas mujeres no tienen nada de "locas", más bien son las únicas cuerdas en ese lugar, en ese instante, y con un inmenso sentido de justicia, patriotismo y dignidad.
Ésta imágen es motivo de bochorno y verguenza para todos los cubanos, que unas pocas indefensas mujeres se enfrenten a los tiranos con solo sus ideas, mientras que otros continúan defendiendo un sistema social que continúa intentando mantenerse en el poder, con la ayuda de la caridad de cualquiera que se compadezca de Cuba.
La limosna que ofrece Venezuela a la dinastía Castro puede que pronto desaparezca, entonces veamos si esos zombies despiertan de su sueño de más de medio siglo, o continúan extendiendo la mano y bajando la cabeza, esperando recibir la caridad de cualquiera que los compadezca.
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