La Policía Nacional Revolucionaria comenzó operativos "preventivos" en toda La Habana desde el 1° de septiembre para garantizar el orden en el concierto patrocinado por el gobierno en la Plaza de la Revolución, el próximo domingo. Según fuentes cercanas a la policía:
Los policías jefes de sector tienen instrucciones de citar o visitar en sus domicilios a la población fichada por antecedentes o por sospechas de delito, de "desafectos a la revolución", solicitud de salidas del país, y a ciertos alcohólicos, para advertirles que serán arrestados si se aproximan siquiera a la Plaza de La Revolución.
El operativo incluye que los citados firmen "actas de advertencia" comprometiéndose a no asistir al concierto, ni alterar el orden bajo amenaza de poder ser procesados, entre otras cosas, por "delito de peligrosidad " como "elementos proclives a la comisión de delito"- figura "legal" penada de 1 a 4 años de prisión.
Así mismo, prevé el "arresto preventivo" de los que consideran más problemáticos.
Ya desde el 27 de agosto se notaba en la calle mayor presencia policiaca y autos patrulla.
Estas prácticas y redadas son habituales en vísperas de fiestas públicas como los carnavales, y de visitas de dignatarios extranjeros, cumbres, y eventos deportivos y culturales que atraen turismo.
Un adolescente fichado por portar una tijera explica: "los jóvenes no tenemos a donde ir, yo iría a oír cantar a Juanes! o a quien venga! pero tendré que perderme del mapa, a casa de mi tía del campo o !no sé!, a cualquier hueco, porque si no "la monada" " - la policía - "me meterá un par de noches de calabozo."
Desde Cuba Jaime Leygonier.
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