Barcelona/ Mambí en A/ Rafael Argote Figueredo, vecino de calle Chano esquina Tivolí en Manzanillo, provincia Granma, Cuba, informa sobre su precaria situación:
“En fecha 11 de febrero en mi vivienda de un solo cuarto se produjo un derrumbe parcial. Me personé con el Delegado del Consejo Popular, con el presidente del Comité de Defensa de la revolución (CDR) y fui al Gobierno Municipal, en este último (ante mis súplicas) me hicieron saber que Bienes Mercantiles no tenía materiales, ni locales que ofrecer, así la única solución era acogerse a un crédito con intereses bancario y dos codeudores que ganaran un salario superior al mío. Pero en mi casa se hace una sola comida al día porque el dinero no alcanza. Por otro lado, mi hijo cumple una sanción por cuatro años y cuando puedo le llevo una jaba y nadie quiere ser codeudor de un pobre y miserable como yo, pues perdería su dinero. Además, el Gobierno le ha subido demasiado los precios a los materiales de construcción y el lema de “los humildes y para los humildes, es una estafa.
Informó desde Manzanillo, Cuba, Tania de la Torre Montesinos, Red Cubana de Comunicadores Comunitarios.
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